Padre de un niño de cinco años y de una niña que le falta un mes para ver la luz, trabajador en defensa de los derechos de los ciudadanos sin un turno fijo, sin saber horarios de trabajo de un día para otro y amante del running desde hace una década, llevo dos años participando en la Maratón de Barcelona y la verdad, es muy muy complicado compaginar entrenos específicos para prepararla con horarios de trabajos difíciles y cumplir como padre y cabeza de familia, pero aún así saco un hueco para salir a correr un ratillo.