En mi trabajo nos exigen estar en forma. El problema reside en que ellos nos ponen un plan de entrenamiento acorde con lo que creen conveniente para rendir en nuestro trabajo, y ese plan está un poco reñido con llevar un entrenamiento que me ayude a mejorar mis marcas. Al final todas las semanas tengo que estrujarme el cerebro para modificar los entrenamiento y evitar sobre entrenarme. Además de eso mi trabajo me hace pasar muchos días fuera de casa interrumpiendo mi entrenamiento. Al final, a trancas y barrancas van saliendo los días poco a poco, y consigo acabar el Maratón de Sevilla en 3:31 (pinche por falta de entrenamiento), e ir mejorando mis entrenamientos y mis marcas muy poquito a poco.